EL ESTADO DE DERECHO, LA LIBERTAD Y LOS TOROS
El otro día al ver esta noticia se me encogió el alma:
"Que se muera": el mensaje de una antitaurina a un niño con cáncer que quiere ser torero.
Adrián tiene ocho años y padece sarcoma de Ewing, un tumor maligno que afecta a los huesos. Su sueño es ser torero y este fin de semana acudió a una corrida benéfica en la participaron Enrique Ponce o El Soro. "Vas a morir", le dice una antitaurina.
Sin embargo, la ilusión de Adrián parece no gustar a algunos antitaurinos, que han deseado la muerte del niño a través de las redes sociales:
“Yo no voy a ser políticamente correcta. Qué va. Que se muera, que se muera ya. Un niño enfermo que quiere curarse para matar herbívoros inocentes y sanos que también quieren vivir. Anda yaaaaa! Adrián, vas a morir”, publicaba la animalista vasca.
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“Que gasto más innecesario se está haciendo en la recuperación de Adrián, ese niño que tiene cáncer, quiere ser torero y cortar orejas”, señalaba en Twitter @Manuel_Ollero, que después intentaba ‘matizar’: “No lo digo por su vida, que me importa dos cojones, lo digo porque probablemente esté siendo tratado en la sanidad pública, con mi dinero".
Si, se me encogió el alma al ver a miembros de esta sociedad en la que vivimos, desprovista de lo mas elemental de un ser humano: la compasión, la concordia, la lastima, la pena, la solidaridad etc. al ver a un niño con una enfermedad grave que tiene un sueño: Quiere ser torero.
Siempre he dicho que la libertad de expresión no se debe coartar, ni manipular ni menospreciar, pero cuando rebasamos esa línea fina de la libertad de expresión en insultar, amenazar y desear algo a alguien, en este caso pisotear los derechos de un niño, débil, desvalido, desprovisto de la fuerza física y mental de un adulto, destruyendo los anhelos de un niño enfermo es desterrar el futuro de este niño y de cualquiera que tenga un sueño.
En un estado de derecho, en una democracia donde el imperio de la ley, la libertad, los derechos civiles están consagrados en nuestra constitución debe de ser sagrado que un niño, que cualquier ser humano, quiera tener un futuro: primero curarse para seguidamente optar por lo que él desee y que no pueda venir ningún “animal” animalista o no, a decir a nadie lo que tiene o lo que no tiene que hacer.
Se debe de endurecer las leyes para que desde el anonimato de las redes sociales no queden impunes estas barbaridades y por supuesto delitos contra lo mas elemental del ser humano; la vida, pero también las amenazas que todos los días se ven en contra de quien opina diferente y siempre o casi siempre son las mismas “ratas” que deberían de hacer un examen de conciencia de sus vidas y de lo que desean, no siendo que algún día se vaya a cumplir algún deseo de alguno en contra de ellos.
Se debe de legislar para que de una vez por todas se respeten las ideas de cada uno sin tener que aguantar insultos por parte de algún cafre que como mal menor tendría que estar en la cárcel o en el destierro de las redes sociales, es decir, prohibir de por vida a todos aquellos que se han manifestado con violencia, con falta de respeto o incluso cometiendo algún delito a través de las redes.
Animo a Adrián desde este foro a que mantenga ese espíritu valiente y que un día muy cercano pueda hacer realidad sus sueños y a todos los antitaurinos si no quieren toros que no los vean, nadie obliga a ir a ninguna plaza, como tampoco se obliga a ir a un estadio de fútbol u otro acontecimiento cualquiera.
Poner en el mismo plano a un animal, a un toro de lidia, (que nace, vive y muere para ser lidiado en una plaza. Es más si no fuera así el toro de lidia se extinguiría por que no tiene más sentido, aunque parezca duro, que el de la lidia) con un ser humano me parece que los animalistas debieran de hacérselo mirar, máxime cuando luego abogan por el aborto libre.
Todo es susceptible de “matarse” los pollos de las granjas, las aves que nos comemos, todos los seres vivos con los que la humanidad se alimenta, incluyendo las plantas y no veo a estos imbéciles sacar pecho defendiendo el maltrato a las lechugas, las zanahorias, las vacas, los corderos etc. Entonces... ¿por qué se persigue al mundo de los toros? Pues muy sencillo: representa a todo lo Español, es un símbolo que nació aquí desde tiempos inmemoriales y aquí perdurara hasta el final de los tiempos y eso para toda esta gentuza que odia a todo lo Español es definitivo.
El respeto al diferente, al que piensa de distinta manera, el que es de otra sensibilidad, son pilares básicos de una convivencia en democracia, en libertad. Si se impide que un niño, además enfermo pueda soñar estaréis destruyendo el futuro más inmediato, estaréis destruyendo los pilares que nos consagran como ciudadanos libres e iguales, estaréis destruyendo el sistema que nos hemos dado, que por cierto ese es el único propósito de toda esta gentuza: la destrucción del sistema democrático y de libertades, pues que mayor libertad que poder elegir cada uno nuestro futuro.
Saludos
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